sábado, 5 de marzo de 2011

¿Qué es y cómo debe actuar un gobierno municipal?


INTEGRACIÓN Y PARTICIPACIÓN CIUDADANA EN EL DISEÑO GENERAL BÁSICO DE GOBIERNO Y OBJETIVOS IRRENUNCIABLES DE ÉSTE:

El Gobierno Municipal es el órgano ejecutivo del Pueblo y debe contar con él pues de él emana y sin él carece de sentido alguno. Por ello habrá de reunirse primeramente con los colectivos, gremios, asociaciones y sectores productivos para asegurar la participación ciudadana máxima posible de una forma ordenada, funcional y capaz.

En cada sector o área de Desarrollo Local debe empezarse por hacer dos preguntas fundamentales: ¿Qué necesita Cieza en vuestro sector? Y ¿Qué necesitáis vosotros de nosotros? Y ambas preguntas con el único objetivo de MEJORAR CIEZA. El gobierno ha de estar al servicio de los ciudadanos y no al revés.

Si logramos ilusionar a las “distintas partes” del corpus ciezano para empujar todos juntos en la misma dirección, la única posible: salir cuanto antes y en las mejores condiciones de esta devastadora crisis, habremos ganado el futuro. Eso, nada más -y nada menos- es lo que Cieza necesita de todos nosotros: que actuemos con una visión global y unitaria (que no hay contradicción en proponer conjunta e indisolublemente tales términos). Con generosidad y solidaridad comunitaria.

Aun cuando unos se ocupen de “dar martillazos a una piedra, otros de fabricar marcos para ventanas, otros de acarrear arena, otros de pintar o decorar frisos y pórticos, y otros de canalizar desagües” a la pregunta ¿qué estás haciendo? La única respuesta válida sería: “una catedral”.

Del mismo modo aun cuando unos y otros -concejales, colectivos, profesionales y ciudadanos particulares- se ocupen de “estimular el turismo, ofertar suelo y naves industriales, desarrollar polígonos y parcelas residenciales, mejorar la calidad en la educación, limpiar y sanear las calles y plazas del pueblo, atraer nuevas inversiones y proyectos laborales, vigilar para que se respete la vida, el trabajo y la libertad de mis vecinos, reunirme con mil para convencerlos de que nuestra fruta es la mejor del mundo” a la pregunta ¿qué estás haciendo? La única respuesta válida sería: “crear empleo y sacar a mi pueblo de la crisis”.

No se crean (o nos creamos, en el mejor de los casos posibles) los concejales que son los más listos del pueblo, que no lo son (o lo somos, en el mejor de los casos posibles). Tampoco es imprescindible que lo seamos, bastará con recabar la ayuda y colaboración de quienes sí lo son. Escuchemos más y hablemos menos y empezaremos a ser un poquito más listos y un poquito más útiles.

Todas las áreas de trabajo recabarán la inclusión y participación de la Juventud y de los Mayores pues a los primeros ha de darse la herramienta para su mejor desarrollo y capacitación y de los otros hemos de obtener el beneficio de su experiencia. Si somos un pequeño partido político abierto, en realidad más una agrupación de electores que otra cosa, cómo no hemos de creer y demandar la participación de todos en la tarea de mejorar Cieza.

Todas las reuniones que se tengan o puedan tenerse con los distintos sectores han de acometerse con el fin de asegurar lo existente y fomentar la creación de puestos de trabajo. La labor de un alcalde no es la propia de un director general de una gran empresa que administra, gestiona, incluso vela, una inmensa plantilla. El alcalde (y todo su gobierno) ha de ser ante todo dos cosas: un científico en busca de un remedio para un problema crucial, y un viajante de comercio que “vende” la marca Cieza, y por extensión “Ciezanos” en todos los mercados posibles, habidos y por haber.

Ilusionaos porque este pueblo ha sabido salir de crisis peores y reinventarse el futuro cuando el presente estaba agotado.

Fuimos, hace siglos, magníficos productores de Seda, pero la seda pasó y hubimos de afrontar su pérdida irremediable y levantarnos, porque no nos gusta estar de rodillas. Fuimos después los mejores productores nacionales de manufacturas de esparto pero aparecieron nuevos productos más baratos y aparentemente más duraderos y se destruyó nuestra industria espartera; y de nuevo nos vimos en la necesidad de ponernos de pie porque nunca nos ha gustado permanecer anclados.

Y somos ahora mismo los mejores productores de fruta de hueso, melocotón, ciruela, albaricoque… que siempre, a lo largo de milenios, en mayor o menor medida, nos ha acompañado y ayudado y nosotros debemos seguir con ella, desarrollarla al máximo, colocarla allí donde todavía no está, porque, además de ser en la actualidad el único motor que nos queda, nos identifica y potencia nacional e internacionalmente.

Pero seamos realistas: la presión a que está sometida el sector -escasez y elevado coste del agua, incertidumbre climatológica, competencia desleal de terceros países en precios y modos de producción, acotamiento geográfico de la superficie de regadío, mano de obra auxiliar poco cualificada…- hace que debamos, irremediable e inmediatamente, mirar también a otra parte y hallar un motor complementario para la economía ciezana.

Lo que tenemos debemos cuidarlo y potenciarlo al cien por cien (agricultura, comercio, transformados, servicios…) pero, desde ya, debemos pensar en traer a Cieza nuevos productos, nuevas comercializaciones, nuevas ideas. Y es precisamente en el sector de la construcción, que se ha hundido arrastrado por la crisis hipotecaria (germen de las réplicas que, como en horrible terremoto, se han reproducido en los sectores inmobiliario, servicios auxiliares, automoción... hasta llegar al pequeño comercio y al autónomo), donde hemos de mirar, con cautela, sí, pero con esperanza, para reconvertirlo en un sector más competitivo, más ágil, más asequible en precios finales, más exportable y menos contaminante.

En esto no sólo hemos de seguir la senda de los países centroeuropeos, si es posible hemos de avanzar pisando fuerte pero deprisa para ponernos en cabeza. No sería la primera vez que lo hiciéramos

Y ahora también lo haremos; porque tenemos el mejor patrimonio para ello: miles de ciezanos y ciezanas dispuestos a arrimar el hombro. Entre todos: Podemos.
Si en esta legislatura no se ponen las bases para crear empleo neto habrá sido, el que sea, un alcalde incompetente y la por venir una legislatura baldía, estéril y nula.

José Luis Vergara, secretario general de CCCi

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