“Por mirar para otro lado cuando tocaba hacerlo de frente,
por hacer lo que no debíamos y no hacer lo que sí era preciso”, así de contundente
se mostró Vergara en el Pleno extraordinario del Estado del Municipio.
No se anduvo por las ramas el
portavoz de los independientes ciezanos en el Pleno del jueves 15 de noviembre,
monográfico sobre el ‘estado del municipio’. Vergara dijo que ya era hora de
que los políticos, “todos, asumamos que somos los principales culpables de la
gigantesca crisis que ahoga a la sociedad, arrastrando personas y familias.
Hay
muchos culpables, es cierto, pero ninguno tanto como nosotros, por acción u
omisión, por pasiva y por activa, por no hacer las cosas que teníamos que hacer
y embarcarnos en otras inciertas o innecesarias” y añadió que “hemos creado una
generación de pesimistas, desafectos y ajenos a la democracia, porque hemos
olvidado cuál es nuestra principal tarea y cuál nuestro principal, casi
exclusivo, jefe: los ciudadanos, uno a uno, con nombres y apellidos y luego
todos juntos como uno solo.
No estamos aquí para defender corporaciones,
balances contables ni cuentas de resultados, no somos gerentes de nada, ni
siquiera gestores al uso empresarial, somos políticos, precioso vocablo que
hemos convertido casi en un insulto y ha sido así porque de nuestro discurso
han desaparecido las ideas, la filosofía y a menudo incluso la ética”.
El único concejal de CCCi recordó que
otros pueblos de nuestro entorno, como Puerto Lumbreras o Ulea, están mucho
mejor que nosotros “todos están mejor que nosotros, incluso aquellos sumergidos
prácticamente en quiebra técnica, porque de estos se puede comprender que
apenas puedan hacer nada pero en Cieza, con un presupuesto de 2011 de más de 30
millones o el de 2012 de 22, no hacemos nada por crear, ya no digo empleo, si
no tan siquiera esperanza, este es un Ayuntamiento de encefalograma plano que
hace algunas ‘cosicas’, faltaría más, pero nada en comparación con lo que
podría y debe hacer”.
Vergara quiso terminar acusándose a
sí mismo de cobardía política por no pedir “más alto y más claro un cambio de
completo de objetivos municipales, que no pueden ser otros que crear empleo,
mejorar la justicia social, defender la educación y la sanidad y procurar la
felicidad de los ciudadanos que representa y pido perdón a los ciudadanos por
algunas de las resoluciones que presentamos en este pleno, por modestas, escasas
y convenientes. A partir de hoy seré más radical pidiendo lo necesario y de
ello lo imprescindible, y dejaré lo puntualmente conveniente para otros más
listos que yo”.